Energías pasivas: Muros Trombe y muros parietodinámicos

El principal objetivo de la arquitectura solar pasiva es reducir drásticamente la dependencia de la energía en su hogar. Se trata de utilizar la poca energía que ya tiene y gestionarla de forma eficaz, minimizando los costes y de esta manera colaboramos con la protección del medio ambiente en este tipo de espacios.

Arquitectura solar pasiva

Uno de los ejemplos más claros de energía desperdiciada es el sol. Durante el medio, podemos utilizar la radiación solar calentando agua, por ejemplo. ¿Por qué no utilizarlo también para calentar el aire de nuestra casa? El Código Técnico de la Edificación en su documento de Ahorro Energético enumera diferentes conceptos basados en la arquitectura bioclimática a considerar, algo que todo Estudio de Ingeniería debería implementar y adecuarse a estas nuevas formas de trabajar.

Invernadero adosado: Fachada de vidrio traslúcido que se adjunta al edificio y cubre al menos el 30% de sus superficies. Este párrafo trata sobre la fachada que puede actuar como separación entre el invernadero y las áreas interiores del edificio. También puede incluir acristalamiento si se desea.

Es posible tener un sistema de aire natural, ya sea recirculando el aire interior o calentando el aire exterior que ingresa al recinto. Este tipo de ventilación de aire forzado pertenece a esta categoría.

Muro parietodinámico: Revestimiento reflectante que aplicas en el interior de tus ventanas que tiene paneles solares. Reduce los costos de calefacción y le permite preenfriar el aire exterior antes de llevarlo a su hogar. Hay dos formas de circulación del aire: puede ser natural (mediante termosifón) o forzada.

Muro Trombe: Una envolvente que depende de la energía solar para la calefacción, generalmente realizada mediante la recirculación del aire interior del edificio con una lámina interior fabricada en fábrica, una cámara de aire y un acristalamiento exterior. La circulación de aire forzado requiere esquemas de ingeniería que se denominan muro solar ventilado. La principal dificultad con la pared solar ventilada es la necesidad de ventilación tanto natural como forzada del espacio.

Como puedes ver en su definición, el objetivo es aprovechar la radiación solar para ayudar a enfriar nuestra casa. Podemos hablar de las paredes y los invernaderos de Trombe. Ambos ayudan a calentar el aire interior o las paredes parietodinámicos que ayudan a precalentar el aire exterior para su ventilación. Todo esto mediante el uso de fachada y radiación solar.

Buenas prácticas en el uso de la Energía Pasiva

Primero analicemos cómo podemos utilizar la radiación solar en nuestro beneficio y luego elegiremos la más adecuada. Para ello, consideramos qué tipo de energía está disponible como alternativa a la radiación solar. Por eso es importante la orientación del edificio o la fachada, especialmente en relación con el norte y el sur. Para la gente del hemisferio norte, los edificios deben apuntar hacia el sur.

Se trata del muro más soleado de la casa, que servirá de colector solar para recibir y almacenar energía del día, y posteriormente transmitirla cuando sea necesario. Con el uso de un panel de vidrio, los rayos solares se pueden difundir para llegar a la pared. Esto provoca un aumento de temperatura en la pared, debido a su capacidad para retener el calor. Poner una capa de vidrio frente a la pared ayuda a eliminar el exceso de energía que se pierde. La energía adicional rebotará en la habitación, donde calentará el aire entre la ventana y la pared.

La recolección de energía renovable del sol es cada vez más común, pero existen diferentes enfoques para maximizar la eficiencia de sus paneles solares. Este artículo analiza el «efecto de captura» que se produce cuando el calor se eleva entre la fachada de un edificio y el cristal de su sombra. El oscurecimiento de las paredes o el uso de láminas negras pueden ayudar a maximizar este proceso.

Las corrientes convectivas proporcionan ventilación natural para que no tenga que introducir calor. Por la noche, la pared retendrá el calor de las primeras horas del día. Para saber qué sistema de IA se adapta mejor a nosotros, primero averigüemos cómo se integrará en nuestro trabajo.

Habitación solar mejor conocida como Invernadero adosado

El invernadero adjunto es el sistema solar pasivo tradicional más utilizado. Se trata de crear una habitación acristalada adyacente al edificio que nos permita aprovechar la energía solar para calentar la casa al mismo tiempo que ganamos un espacio. Actúan como una zona de amortiguación en la casa que la mantiene aislada de los elementos.

En verano, puedes utilizar este invernadero como chimenea solar durante el día y aprovechando su efecto chimenea por la noche. En invierno, el sol no estará tan alto en el cielo, lo que significa que un solárium se utilizará mucho. Durante el día se calentará para calentarlo y por la noche ayudará a evitar que su casa se enfríe demasiado. Se puede agregar un piso de piedra para aumentar la inercia térmica. Los pisos de piedra pueden almacenar radiación térmica de la misma manera que lo hacen las paredes de mampostería.

Para permanecer lo más cómodo posible por la noche, cierre los conductos de ventilación entre la casa y el exterior y aísle las ventanas desde el interior. De lo contrario, parte del calor diurno acumulado se perderá al exterior durante la noche.

Chimenea solar o Muro Parietodinámico

Este es un buen diseño si su cabeza no quiere introducir aire exterior pero no quiere que afecte cómo se siente por dentro. Las paredes que dan al sol estarán más frías que el resto de la estructura, por lo que es posible que no tengan mucha masa.

El funcionamiento de esta instalación se basa en la corriente convectiva creada por la estructura de vidrio colocada frente a nuestra fachada para aspirar o soplar aire según nuestras necesidades de climatización.

En invierno, tendremos un sistema que canaliza el aire frío del exterior para que fluya a través de los paneles solares antes de entrar. Con la llegada del verano se modificarán las aberturas de las ventanas para que una corriente de aire constante pueda generar una succión y extraer aire caliente del interior de la casa al exterior.

Muro Trombe

La pared Trombe es una forma de calefacción solar pasiva. Consiste en un muro límite largo que tiene cierto grado de gradiente de temperatura, el sol brilla durante el día y el calor se almacena en el interior durante la noche.

Durante el día, la pared irradiará energía solar y acumulará calor. Por la noche, emitirá este calor para ayudar a calentar la casa.

Ahí es donde se diferencia de los otros sistemas. Como se especifica en el Código Técnico de la Edificación, este sistema se utiliza para calentar el aire dentro de una habitación. En otras palabras, este sistema está diseñado para soportar edificios que requieren sistemas de enfriamiento interior, generalmente aquellos en climas más fríos.

En verano es importante proteger los edificios de la radiación solar y en invierno, utilizarlo.

En lugar de construirse con ladrillos, las losas de hormigón a menudo se reemplazan por bidones de agua. Esto proporciona a las personas dentro de la zona un mayor nivel de comodidad durante el invierno, ya que existe una mayor probabilidad de que las corrientes convectivas generen calor.

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